Se le llaman Flores de Bach, en la serie de 38 esencias naturales extraídas de flores silvestres de la región de Gales, en Gran Bretaña, cuyas propiedades curativas fueron descubiertas por el médico galés Edward Bach entre los años 1926 en 1934. El dr. Edward Bach (1886-1936), médico, bacteriólogo, homeópata e investigador, halló en los remedios florales, una forma de terapia de gran eficacia. Se le considera el fundador de la terapia floral.

Edward Bach definía a la enfermedad como un desequilibrio emocional que se produce en el campo energético del ser vivo. Si este desequilibrio sigue por cierto tiempo sin tratamiento, se produce la enfermedad en el cuerpo físico. Lo definía muy bien con esta frase "la enfermedad es una especie de consolidación de una actitud mental y sólo es necesario tratar esa actitud mental y la enfermedad va a desaparecer".

Es un remedio natural, apto para todas las edades y estados y está reconocido por la OMS.

Trabaja principalmente con los estados emocionales y mentales de las personas, ayudando a equilibrarlos y liberar la carga emocional nocivo que pueda estar afectando a la salud. Cada una de las 38 flores tiene una propiedad específica y el médico Bach creó varios remedios combinando distintas flores en función de los síntomas y emociones del paciente.

Los remedios de Bach son considerados sistémicos, ya que actúan sobre los distintos niveles de la persona: físico, emocional, mental y espiritual. Esta terapia se utiliza para tratar problemas emocionales como la ansiedad, la depresión, el miedo, la tristeza, el estrés, entre otros. También se utilizan para promover la curación física, mejorar la concentración y el bienestar general.

Para obtener el remedio de Bach adecuado, debe realizarse una entrevista con un terapeuta o profesional especializado en terapias florales. Esta entrevista servirá para identificar los estados emocionales y mentales del paciente y seleccionar las flores adecuadas para su situación.

En resumen, los remedios de Bach son una forma natural, segura y eficaz de tratamiento para problemas emocionales y mentales, que puede utilizarse paralelamente a otras terapias convencionales. Son una herramienta útil para promover la salud y el bienestar en general, puesto que trabajan a nivel global de la persona.